Tortel
Esta zona fue recorrida desde tiempos prehistóricos por los nómades canoeros Kawesqar, hoy prácticamente extinguidos. El primer europeo en avistar este territorio habría sido Hernando de Magallanes en 1520, nominándolo “Tierras de Diciembre”. En los siglos XVI y XVII se suceden doce expediciones españolas en busca de la Ciudad de los Césares e intentando evitar una ocupación inglesa, de hecho el naufragio de la fragata Wager en 1741, relatado por John Byron, constituye el primer “bestseller” del litoral de Aysén.
Basado en las descripciones de P. Sarmiento de Gamboa (1579), B. Díaz Gallardo y A. de la Vea (1675-76) y el jesuita J. García Alsué, quién sería el primero en llegar al actual canal Baker, (que nomina “Mesier” y que ocupa la “Nación Calén”), Juan de la Cruz Cano i Olmedilla confecciona en 1775 el primer mapa del área en la cual desemboca el “río de los Cau Caos Bravos” como desaguadero del “Lago Chelenco” (hoy Río Baker y Lago General Carrera – Buenos Aires).
En 1798 se entrega el dominio del “Potrero de los Rabudos”, entre los 43º y 48º Sur, a Juan Levién en pago de sus servicios al Capitán Moraleda, lo cual no se hizo afectivo. Entre 1826 a 1830 la Expedición Hidrográfica de King y Stokes levanta parte del área y bautiza en honor a su Almirante las Islas Baker, ubicadas a la entrada de un canal que se insinúa.
El primer reconocimiento chileno del área ocurrió en 1888 cuando el Cdte. Adolfo Rodríguez, de la Armada chilena, a bordo del escampavía “Toro”, explora el fiordo Calen o Baker y descubre los ríos Bravo y Pascua. En base de esta información el Gobierno de Chile otorga la primera concesión de 300.000 Há de tierras fiscales en el Baker a Julio Vicuña Subercaseaux, la que nunca se llevó a cabo, caducando.
En 1897 una expedición argentina, a bordo del “Azopardo” y “Golondrina”, dirigida por el perito Francisco P. Moreno, reconoce el canal Baker y la desembocadura del río Baker que bautizan “Las Heras”, topónimo que subsiste en el cerro ubicado al norte de su desembocadura.
Caleta Tortel, una pequeña localidad dominada por el color de las aguas del Río Baker, de las pasarelas hechas de madera, lo que la convierten en un poderoso atractivo turístico del fin del mundo.
Al año siguiente, por encargo del perito de límites chileno Barros Arana, el geógrafo alemán Hans Steffen explora cuidadosamente el área, “descubriendo” el capitán Rodríguez el río Baker. Posteriormente en 1901-02 el Cdte. Francisco Nef levanta el Seno Baker y canales adyacentes, mientras Ricardo Michell reconoce el valle del Baker, Bravo y Pascua para la Comisión de Límites, siendo visitada la zona por el árbitro Sir Thomas Holdrich, en 1902.
En 1901 se otorgó concesión a Juan Tornero y otros, para introducir 1000 familias de colonos europeos entre los 42º y 52º, lo cual se reformuló al constituirse en 1903 la Sociedad Nacional de Ganadería y Colonización, más tarde llamada Compañía Explotadora del Baker, con la participación de Mauricio Braun H. y otros poderosos empresarios de Punta Arenas. Esta compañía sería la primera en ocupar el área con instalaciones en Puerto Bajo Pisagua, ubicado en el costado Norte de la desembocadura del Baker, y casas, puestos y sendas río arriba. En 1907 instala además un aserradero y muelle en lo que hoy es el Rincón de Caleta Tortel.
En 1906 ocurre la muerte de 59 trabajadores chilotes, probablemente de hambre y escorbuto, vestigio de lo cual subsiste hasta hoy en el cementerio de la “Isla de los Muertos”. Este hecho y otras causas llevan a la paralización de los trabajos e inversiones y a la quiebra de la compañía en 1908, caducándose la concesión en 1911.
Pasarelas de Ciprés de las Guaitecas en Caleta Tortel
En 1914 se remata la concesión del área a Julio Vicuña Subercaseaux, quien transfiere sus derechos a la Sociedad Colectiva de Estancias, posadas de Hobbs y Cía., lo cual se acepta por el gobierno en 1916. Nuevamente aparece como socio de esta Compañía, Mauricio Braun junto a Francisco Campos y otros. La administración recae en el terrateniente británico Esteban Lucas Bridges, que también era socio de la compañía, y nuevamente se utiliza como puerto Bajo Pisagua, cuyas instalaciones, son quemadas en 1932. En esas décadas comienzan a ocupar el área los primeros colonos ilegales y, a causa de eso, llegan los primeros policías remunerados por la compañía. En definitiva se ajusta en 1927 la concesión, entregando territorio a los ocupantes.
Entre 1940 y 1944 se quema gran parte del territorio, un desastre ecológico de graves consecuencias. Según el censo de 1943, el Bajo Baker estaba virtualmente deshabitado.
En 1954, por solicitud de los colonos – pobladores, y siendo Comandante en Jefe de la III Zona Naval el Contraalmirante Donald Mc Intyre Griffiths, la Armada les comienza a asistir, creando en 1955 el Puesto de Vigías y Señales de Caleta Tortel. El radio telegrafista y enfermero Marcos Cancino y su esposa quedan a cargo de la base, mientras los pobladores encabezados por Don Reynaldo Sandoval C. construyen el “Galpón Rosado” y Alejandro Mansilla construye su casa con madera del muelle de la primera compañía, siendo el primer poblador de Caleta Tortel. El nombre dado homenajea a Jean Tortel, marino francés que prestó sus servicios durante la Guerra de Independencia de Chile.
La explotación del Ciprés de las Guaitecas marca la historia de esta zona de la Patagonia Chilena, del Baker y de la historia de sus balseros que transportaban la madera a través del Río.
Caleta Tortel se va consolidando al instalarse la ECA en 1966 con poder de compra de estacones de ciprés y venta de alimentos, creándose la comuna el 27 de agosto de 1970, construyendo la Armada una escuela es 1978 y el MOP un aeródromo en 1980, y dándose vida a la Municipalidad de Tortel en 1981, con el Sgto. de la Armada, Oscar Quiroga como primer Alcalde. Así, la población de 227 habitantes en 1970, aumenta a 292 en 1982, los cuales van construyendo refugios – viviendas en grupos a lo largo de la ensenada de Caleta Tortel, uniéndose estos paulatinamente mediante envaralados, puentes y escaleras, origen de las actuales pasarelas.
Por otra parte, en 1967 se crean los Parques Naturales Guayaneco y Laguna San Rafael, y en 1974 se crea la Reserva Forestal Río Pascua, áreas silvestres protegidas que cubren sobre 80% de la superficie comunal. En 1982 estas son reclasificadas por Conaf, manteniéndose el Parque Nacional Laguna San Rafael, nominado reserva de la biodiversidad por Unesco, que comprende íntegramente el Campo de Hielo Norte, y creándose el P.N. Bernardo O’Higgins, el más extenso del país y que incluye al Campo de Hielo Sur, más la Reserva Nacional Katalalixar.
Los hechos relevantes de los últimos 20 años, son la construcción de nuevas instalaciones municipales, la plaza cubierta, la biblioteca, la casa de la comunidad, el retén y viviendas de Carabineros, la Radio MADIPRO y viviendas sociales del SERVIU. Y luego, la construcción de la nueva escuela y posta ubicadas fuera del centro histórico, en el área de expansión y con una inversión que supera los 800 millones de pesos. Por otra parte, se instala la red definitiva de agua potable, una pequeña central hidroeléctrica y red de distribución domiciliaria, gratuita, mientras se une el poblado y el aeródromo con alrededor de 6 kilómetros de pasarelas de ciprés. Destaca la llegada de tres canales de televisión abierta más aquella satelital. También se construyen varios muelles y se subsidia el transporte aéreo y la conexión hacia la Carretera Austral, con lo que se supera en gran medida el aislamiento.
En esos años surge, con apoyo estatal, la primera empresa productiva de Tortel, un aserradero y elaboradora de ciprés, que se instala en el sector del aeródromo. También Tortel aparece en varias oportunidades en los medios de comunicación nacionales, con lo que se difunden sus peculiares virtudes e incentiva el turismo, surgiendo dos hostales, otros alojamientos, un café-bar-salón de baile y varios transporte en “chata” (lancha).
En 1997 se fija el límite urbano de Caleta Tortel, el que incluye cerca de 25 ha y permite medir una densidad de 12 hab./ha. Un censo municipal arroja una población de 370 hbts. En este año además se elabora el Plan de Desarrollo Comunal 1997 – 2001.
En 1999 se construyen 3 prototipos de unidades sanitarias secas, esperándose que el MOP masifique el sistema para solucionar el acuciante problema de los efluentes cloacales. También comienza la construcción de un camino de 25 km desde su conexión con la Carretera Austral a Caleta Tortel, con un costo de 60 millones de pesos el kilómetro. Una solución de menor costo e impacto evidentemente era mejorar los medios de navegación por el Río Baker, infraestructura natural gratuita. A fines de este año se oficializa el loteo de Tortel, lo que permitiría dar títulos de dominio a los pobladores por parte del Ministerio de Bienes Nacionales. Debido a los errores que contiene ese instrumento, aún se está reformulando, mientras la Escuela de Arquitectura de la Universidad de los Lagos se encuentra confeccionando el Plan Regulador Urbano de Tortel.
Durante el año 2003, Caleta Tortel queda completamente unida al resto del país, gracias a la inauguración de un nuevo tramo de la Carretera Austral. A partir de fines del año 2004, se inicia un nuevo proceso social y productivo en la comuna, marcada por un aumento de la participación ciudadana local y una alta atracción de inversiones públicas y privadas, que desde entonces han consolidado y proyectado este territorio al futuro.